Buscar en esta edición

Buscar en todas las ediciones

Ciencia/Salud
Publicado en la ed. impresa: Ciencia/Salud
Domingo 26 de diciembre de 2004
Los científicos y un deseo unánime: ser útiles al país
Qué quieren los investigadores para 2005Agregar a mi carpeta

Subrayan que, si bien en 2004 se mejoró, se requiere un programa de Estado para poder seguir desarrollando la ciencia

  • Muchos consideran que es necesario duplicar el presupuesto del área
  • También piden que las políticas se mantengan durante varios años

Ya a las puertas de un nuevo año, LA NACION pidió a destacados científicos argentinos que sintetizaran cuáles son sus deseos para 2005. Aquí, sus respuestas:

Lino Barañao (biólogo, presidente de la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica): "Deseo que finalmente nuestro país avance hacia un nuevo perfil productivo basado en el conocimiento. No sólo porque es necesario para nuestra supervivencia en la economía globalizada, sino porque las sociedades cuyas economías se basan en el conocimiento suelen ser sociedades más justas, donde la educación, tal como ocurriera en el país décadas atrás, garantiza la inclusión social".

Galo Soler-Illia (físico, Comisión Nacional de Energía Atómica): "Si queremos crear riquezas genuinas en el futuro, tendremos que saber generar conocimiento. Aunque hubo pasos interesantes, todavía creo que la sociedad ve a los investigadores como una curiosidad de museo. Esperemos que este año comencemos a interactuar fuertemente con la industria para potenciar nuestro futuro".

Néstor Carri (Instituto Multidisciplinario de Biología Celular): "Quiero que se cambie la evaluación de los investigadores, ya que hoy se evalúa con herramientas inapropiadas. La utilización del «impact factor» no sirve para una Comisión Asesora de Evaluación. Quiero que se lean y analicen los trabajos de los investigadores".

Elizabeth Jares-Erijman (química, Fceyn, UBA): "Espero que podamos empezar a pensar en el futuro a mediano y largo plazo. Que entendamos que la idea de que un mayor apoyo al avance del conocimiento y la educación redundará en mejoras cualitativas en la calidad de vida de la gente".

Osvaldo Uchitel (neurofisiólogo, Fceyn, UBA): "Deseo que en 2005 se cumpla la tantas veces postergada promesa de nuestros gobernantes de apostar a la educación y a la ciencia como garantes de un desarrollo con equidad. Espero que esto se concrete en un salto extraordinario en la inversión en educación, ciencia y tecnología".

Gonzalo Prat-Gay (biólogo molecular, Instituto Leloir): "¿Qué necesitan la industria y el campo para crecer generando trabajo y distribución? Ciencia y tecnología hechas en el país. Educación, salud, seguridad, ciencia, todos dependen de la Justicia. Así, no habrá más chicos que se mueran en nuestro país por ser pobres. Entonces, quizás, alguien reconocerá a los científicos como un capital valioso para el desarrollo de un país sano e independiente".

Alberto Lamagna (físico, Comisión Nacional de Energía Atómica): "Espero que se implementen políticas de ingreso de jóvenes en las instituciones de investigación, de manera articulada con grandes proyectos de desarrollo tecnológico, en áreas estratégicas que permitan en el mediano plazo crear valor económico a través del uso intensivo del conocimiento científico. Muchos vemos que se empezaron a dar pasos importantes en la dirección correcta y esperamos que se sostengan".

Darío Codner (vicedirector del Programa de Universidad Virtual de la Universidad Nacional de Quilmes): "Creo que estamos lejos de pegar el salto, por lo tanto, no espero mucho de 2005. En todo caso, que se continúe trabajando para construir una sociedad con una mejor calidad de vida y mejor distribuida. Pero lo más importante es que los científicos, como la sociedad toda, podamos soñar con un país distinto".

Juan Pablo Paz (físico, Fceyn, UBA): "Ojalá que éste sea el año en que se disipen nuestras dudas y se consolide nuestra esperanza. Me da la sensación de que todos vemos que hay signos positivos, pero todavía dudamos de si lo que estamos viendo es una «fluctuación» o si de una vez por todas se va a definir una política de Estado y se va a promover la ciencia en serio. Espero que en 2005 nadie me pregunte para qué sirve hacer ciencia en la Argentina".  

Adrián Paenza (matemático y periodista): "Es imprescindible duplicar el presupuesto. Hemos dado algunos pasos, pero aún estamos lejos de tener una política científica seria. Espero un mejor aprovechamiento de los recursos. Buscamos afuera lo que ya tenemos, pero desconocemos. Que los científicos tengan una mejor relación con la sociedad. Y quisiera que se generara una corriente con los argentinos que están en el exterior y que claman desde hace tiempo por tener una organización que los ayude a ayudar".

Luis Beaugé (biofísico del Instituto de Investigaciones Médicas Mercedes y Martín Ferreira, de Córdoba): "Es vital, para la ciencia y para la sociedad, que esta última cumpla con sus obligaciones respecto de aquella. Debemos asumir la responsabilidad que nos cabe por la difícil situación que atraviesa la ciencia argentina. La Argentina no tiene ciencia autónoma, el lograrlo es una prioridad nacional".

  Fidel Shaposnik (Físico, Universidad Nacional de La Plata): "Mucho mejoró en el financiamiento de la ciencia en 2004, pero hay una franja de investigadores -los que tienen entre 30 y 40 años, que han regresado o planean regresar al país luego de exitosas estadías en los mejores centros del mundo, y cuyo sueldos siguen siendo miserablemente bajos-. La esperanza para 2005 es que esto cambie e incite a parte de la joven diáspora científica argentina al regreso. Desde la física, 2005 es muy especial: las Naciones Unidas han organizado un festejo por los 100 años de tres trabajos maravillosos que publicó el joven Einstein (tenía 26 años...).  Mientras festejamos, los físicos esperamos que algunos de los problemas fundamentales encuentren solución". 

Pablo Jacovkis (matemático, decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UBA): "Espero que continúe la política de aumentar las becas e ingresos a carrera de investigador del Conicet, que se facilite la incorporación de investigadores, y de becarios a muchas universidades que no impulsan suficientemente la investigación y el desarrollo, que se planifiquen políticas de fomento al ingreso de estudiantes a carreras con sesgo científico y tecnológico, que se incentive la enseñanza de las ciencias en las escuelas medias. Y, por supuesto, que aumente el presupuesto para ciencia y tecnología".

Diego Golombek (neurobiólogo, Universidad Nacional de Quilmes): "Para 2005 el sistema científico tiene que seguir creciendo, también estimulando a que más estudiantes se inclinen por carreras científicas. Debe seguir alta la meta de mejorar el porcentaje del PBI dedicado a ciencia y tecnología como cuestión de Estado: como diría Cereijido, que los gobernantes no apoyen "a" la ciencia sino que se apoyen "en" la ciencia. Por otro lado, la iniciativa de parques tecnológicos en los que interactúen empresas, universidades e instituciones de ciencia y tecnología debe fomentarse fuertemente. Y hay que seguir mejorando la enseñanza de la ciencia en las escuelas, ¡un poco de racionalismo y curiosidad no se le niegan a nadie!"

Alejandro Gangui (Astrofísico, Instituto de Astronomía y Física del Espacio): "Espero que el apoyo a la ciencia argentina que se ha visto en los últimos meses se mantenga por muchos años, única forma de revertir lentamente el rápido retroceso científico general de nuestra región. La ciencia debería poblar las calles y llegar aún más al público general".

Diego Hurtado de Mendoza (director del Centro de Estudios de la Ciencia de la Universidad Nacional de San Martín): "En 2005 se cumplen 50 años de la creación del Instituto Balseiro. La historia del instituto es rica en obstáculos y en modos creativos y tenaces de superarlos. Pensando en esto, me gustaría plantear una modesta utopía: que en 2005 el presidente y el ministro de educación visiten el Instituto Balseiro convencidos de que un plan social o los índices de desocupación están también vinculados con lo que ocurre en nuestros laboratorios. Finalmente, imagino a nuestros empresarios tratando de comprender cuál es el papel de la ciencia en el desarrollo del país."

Por Nora Bär
De la Redacción de LA NACION


Link corto: http://www.lanacion.com.ar/666258

mi carpeta
Estilo | | |